Cuando esta dura experiencia tiene lugar, es preciso abordarla desde diferentes perspectivas, que en estas páginas se desarrollan con la intención de aportar luz sobre un tema casi siempre relegado a la sombra: la correcta información, el buen acompañamiento y el apoyo del entorno, la intervención psicológica, la despedida y los rituales de la pérdida, los estudios médicos posteriores. Aspectos que no deben ser tratados como tabúes, porque en tal caso sólo contribuyen a añadir un dolor innecesario a un dolor de por sí inevitable.