Sabemos muy poco de la Bolsa y, sin embargo, rige nuestras vidas y nuestro comportamiento en muchos aspectos. Cualquier variación en la Bolsa puede suponer un cambio en la cantidad de dinero que pagamos por nuestra hipoteca cada mes, que vengan menos turistas a nuestras costas o que suba el precio de la gasolina repentinamente. Todos los agentes económicos que rigen el funcionamiento de la sociedad están pendientes de la Bolsa, y el autor se propone explicarnos los mecanismos a través de los cuales las subidas y bajadas de las acciones tienen una consecuencia directa sobre el estado de la economía. La Bolsa contada con sencillez no nos desvela ninguna fórmula mágica para hacernos ricos de un día para otro, tales fórmulas no existen, pero nos orientan para hacer nuestros pinitos en el mundo de las inversiones.