Entre los veranos de 1967 y 1968 Irene lo gana y lo pierde todo. Una sobrecogedora historia de amor, un oscuro secreto familiar, una España sumida en el franquismo.
Irene, una mujer fuerte y atormentada, revive a través de una carta la historia de los que fueron los mejores y peores meses de su vida. Sus padres, exiliados políticos en México, regresan a España tras recibir como herencia La Bolivia, una hermosa hacienda cerca de Granada.
La joven había pasado de vivir en una ciudad alegre y bulliciosa a un país triste, gris y reprimido. Pero su da un giro radical cuando, en el verano de 1967, llega a la finca una familia inglesa para pasar las vacaciones. El hijo, Richard, es alto, rubio, tiene los ojos azules y se convertirá en su primer gran amor. Juntos descubrirán los rincones de la casa, explorarán el inmenso terreno y fantasearán con tesoros escondidos en la finca. Él hará que este sea un verano inolvidable para Irene, el último de su infancia.