«Un libro único, devastador, de poca extensión física pero intensísimo, exponencial en sus posibilidades de imprescindible relectura» (Lluís Muntada, El País).
«Pàmies se va configurando como un tolstoiano de la narración corta, que parte de las ilusiones perdidas para construir delicados monumentos» (Vicens Pagès, El Periódico de Catalunya).