Robert Graves ya había dicho que no conocía ningún poeta británico de origen que pudiese hacer con la lengua lo que Walcott consigue con su escritura. Brodsky lo reconocía como el mejor poeta contemporáneo en lengua inglesa y otros de sus amigos, el también enorme poeta irlandés Seamus Heaney, lo explicaba diciendo que Walcott ha sabido << demotizar >> la lengua, subvertiéndola y enriqueciéndola hasta extremos inesperados con la introducción de giros provenientes del patois y dándole un colorido hasta entonces insólito.