Volviendo la vista atrás, Jimmy comienza a entender cómo los acontecimientos que se desarrollaron a sus once años se transformaron en aquel torbellino que lo zarandeó de lado a lado sin que él pudiese comprender nada y que lo arrasó todo: Raggleton, sus amigos y su familia. Esas cosas no deberían sucederle a un niño. Un niño no tendría que preocuparse por sus padres, ni por nada de nada, o puede que un poquito por el colegio...
Jimmy Sullivan es una de las obras neozelandesas más celebradas del s.XX.