Convertida en la bromista de clase para evitar que se burlen de ella por su tartamudez, un buen día decide dejar de estar siempre de broma y ser más seria. Pero descubrirá que le es imposible no ser divertida...¡y que los profesores no la castiguen!
Es así como tendrá que escoger entre estar castigada todo el curso o participar en el MUSICAL de la escuela.
Una comedia musical con la que llorar de risa y también de emoción. Y es que la vida de Jacky no es ninguna broma.