Pero, un día, en aquél gélido mundo aparece una figura extraña, llena de pinchos, y nuestro protagonista ve como a su alrededor todo se transforma en un espectacular paraíso invernal. ¿Pero cuánto tiempo durará ese hechizo?
Las inconfundibles ilustraciones de Kazuno Kohara, con su autolimitada gama de colores y su extraordinaria técnica de linograbado, encajan a la perfección con la ingeniosa versión de esta clásica narración, un cuento elegante y seductor que atrae la mirada de los niños.