Argumento de Heloïse Perfundet Omnia Luce
Este libro impregna todo de luz y es objeto de arte que documenta y explica la instalación y la performance que hizo Elena del Rivero en 2009 en la escalera noble de la Universidad de Barcelona. Ha sido producido por el Centro de Investigación Duoda. El título de este libro forma parte es el lema de la UB, abandonado hace años y recuperado hace poco por influencia secreta de esa instalación. Elena modificó el lema y dio el protagonismo a Heloïse para celebrar que las universidades se han feminizado. ¿Por qué Heloïse? Porque Eloísa rompió un nudo del amor y del conocimiento en la historia de Europa. Dejó de lado la idealización de la mujer propia de los hombres cultos de su tiempo, y vivió la unión sagrada y completa entre la materia y el espíritu en su experiencia amorosa y cognitiva femenina. Entró en una historia de amor intensísima, primero muy bella y luego muy trágica, con su maestro de filosofía Abelardo. Fue descubierta por su tutor, que se vengó de la deslealtad de él pagando a unos sicarios que lo castraron al alba. Eloísa tuvo un hijo al que llamó Astrolabio en homenaje a este invento científico. Y se recluyó para siempre, contra su voluntad y sin arrepentirse nunca de nada, en un monasterio. El encuentro de mujeres y hombres en el conocimiento está acabando, también hoy, en tragedia, porque ha resultado, de momento, infértil: ha dado a luz a otro astrolabio, a muchos astrolabios, a algo que ya estaba, a un conocimiento que sigue neutro pretendidamente universal. En él, pocas mujeres hablamos como mujeres. Pero en estas pocas y en los hombres que las secundan se vislumbra una aurora, algo fecundo. Y es esto lo que el libro documenta, celebra e impulsa.1