Venancio Martínez, fotógrafo maduro de un diario madrileño, es trasladado a Bilbao para reemplazar a un colega fallecido recientemente. A su llegada conocerá a la bella, pasional e intrigante fotógrafa veinteañera Idoia, quién lo introducirá con toda la intensidad de un dispar romance en el conflicto independentista vasco. Las muertes y la barbarie del enfrentamiento marcarán al lector de "Hay cosas que los hombres nunca entenderéis" y la irracionalidad y el dolor en ambos bandos le quedarán grabados como esquirlas de las bombas molotov fotografiadas por Venancio Martínez.