«La puerta pesaba sobre el lado más oscuro de mi alma. Con total seguridad, supe que cualquier puerta iba a ser? "esa puerta" y que sin duda me llevaría a uno de esos lugares horribles que existen en determinadas dimensiones del universo y que están ahí, cerca, a una botella de distancia.»
Pablo Ramos convoca en este libro a todos sus fantasmas, que son también los de una sociedad donde el alcoholismo y la adicción a las drogas dibujan el paisaje cotidiano de las familias y los barrios. Los convoca y los desnuda, para mostrar desde dentro cómo es, en el más crudo día a día y lejos de estigmatizaciones y complacencias, la vida de un adicto.
Adictos que no son estereotipos, sino seres humanos que se llaman Lulú, Isabel, Willy, Rolando, Andrea... y el propio autor, que escribió estas crónicas con conocimiento de causa, en el vaivén de sobriedades y recaídas, y con la convicción de que existe una salida: el Programa de los Doce Pasos.
Hasta que puedas quererte solo revela lo que la droga da y lo que quita, el agujero negro de la necesidad que viene a llenar pero que solo vuelve más profundo, la dolorosa lucha de la abstinencia y, en el trasfondo, el infierno del desamor y la bendición de la ternura.