Calista Langley regenta en el Londres victoriano una agencia de «presentaciones» dirigida a damas y caballeros respetables que buscan pareja. Desde hace un tiempo, está recibiendo obsequios siniestros un espejo negro, una corona fúnebre, una campanilla de ataúd , todos con sus iniciales grabadas.
Convencida de que obtendrá ayuda de la policía, Calista recurre a Trent Hastings, un solitario escritor de novelas de misterio poco afecto a las relaciones sociales.
Mientras Trent y Calista revisan los archivos de los clientes rechazados con la esperanza de identificar al acosador, comienza a ser obvio que la clave podría proceder del pasado secreto de Calista
y que la vida de esta corre peligro.