Arturo Calviá ha dedicado su vida a levantar el prestigioso restaurante LEspatarrat y está a punto de ver la culminación de su carrera con una importantísima comida para altos mandatarios internacionales en la que la peculiar ministra del Interior ejerce de anfitriona, pero la madrugada anterior ocurre un trágico acontecimiento: un conocido crítico gastronómico desaparece.
A partir de este momento los hechos van sucediéndose a una velocidad trepidante, conforme los pintorescos personajes de la trama hacen acto de aparición, como el cocinero con cuadros de ansiedad, el sommelier daltónico, su jefe de sala con alma de gánster o su ex, una fanática de la filosofía zen.