Tras varias reformas, la Política Agrícola Común (PAC) se enfrenta de nuevo a una profunda revisión. Desde Bruselas se habla de una PAC más verde y menos injusta. Sin, embargo, en las propuestas de la Comisión Europea siguen primando la mercantilización de los alimentos y la competitividad de la industria agroalimentaria europea en detrimento de la agricultura menos intensiva y a pequeña escala, de la calidad de los alimentos y del medio ambiente tanto de la Unión Europea como del conjunto del planeta.
Las reformas se plantean en un marco de sobreproducción europea y liberalismo comercial, y gradualmente convierten a la PAC en una política cuya principal preocupación es salvaguardar los intereses de la industria agroalimentaria, garantizándole materia prima a bajo precio y asegurándole mercados. Pero ello no sólo supone una vuelta de tuerca para la reconversión del campo europeo, sino que permite a la industria seguir exportando alimentos a precio de dumping, con efectos devastadores para la producción local en países del Sur.
Globalizar el Hambre analiza las sucesivas reformas de la PAC, y expone de forma exhaustiva y bien documentada los efectos de esta política en la agricultura europea y de gran número de países empobrecidos, donde la PAC y las políticas de libre comercio de las últimas décadas se han convertido en una auténtica máquina de generar hambre y miseria.