Argumento de Girona Contada a Un Transeúnte
Los gerundenses en cuanto pisamos los adoquines gastados de la calle de la Força nos sentimos diferentes. Nos gusta pensar que en torno a nuestra cabeza brilla una luz diferente que nos señala y que nos obliga a alzar la vista para contemplar un horizonte invisible. Qué quiere que le diga? Somos gente pastada a la antigua, una clase de burgueses con barretina venidos a más, o a menos, aunque eso, al fin y al cabo, es relativo. Y mirado con perspectiva histórica, completamente irrelevante. Este libro, como su título indica, va dirigido a un transeúnte. En Girona se puede ser transeúnte per un día o para toda la vida, en esta ciudad ser forastero no es una condición que, en un momento dado, usted pueda decidir borrar de su currículo. Más temprano que tarde, encontrará a alguien que se lo recuerde. Girona es una ciudad difícil, este libro le ayudará a comprenderlo, pero antes que usted lo lea debo advertirle una cosa: si la ha visitado, ha hecho sus fotografías y ha comprado los recuerdos imprescindibles, puede que sea un buen momento para plantearse huir cuanto antes...0