Definía la ética Fernando Savater, en su conocido Ética para Amador, como «el arte de vivir, el saber vivir, por lo tanto el arte de discernir lo que nos conviene (lo bueno) y lo que no nos conviene (lo malo)». Este libro logra anticipar un nuevo clásico, una obra de divulgación filosófica que nos hace cuestionarnos nuestra forma de sociabilizarnos. Su lectura nos llevará a perder el miedo, el miedo a Dios, a la muerte, a la propia vida, para alcanzar la libertad, reivindicar el orgullo como dignidad y ser conscientes de nuestra realidad, nuestro papel, como parte fundamental del Universo. La más importante, y difícil, tarea que propone este libro es que tomemos conciencia de nuestro propio poder, de nuestra propia dignidad y que seamos consecuentes con nuestro estatus de humanidad. Y ¿qué podemos hacer? Pues... volver a pensar quiénes somos y de dónde venimos, una vez más (y las veces que sean necesarias).