Argumento de Fantásticos Amigos
Vlad es un vampiro de ocho años normal y corriente. Lo único que lo diferencia del resto es lo mal que se le da serlo: no le gusta cómo sabe la sangre, es incapaz de transformarse en murciélago y, por ejemplo, en lugar de dormir durante el día (como todo buen vampiro que se precie), se queda despierto hasta el anochecer leyendo una novela sobre humanos que encontró escondida en la enorme biblioteca de la Mansión Miseria. Vlad está feliz con sus incursiones al pueblo vecino y con la amistad de Minxie, su compañera en el colegio de los humanos. Sin embargo, sus padres quieren enviarlo a Transilvania porque no progresa en sus estudios vampíricos. Gracias a la mediación del abuelo Gory, Vlad consigue eludir el castigo y son sus padres los que viajan al país de sus antepasados. Esta circunstancia es aprovechada por el pequeño vampiro para integrarse aún más en la vida cotidiana de los humanos.1