Pocas cuestiones suscitan en la ciudadanía y en los gobiernos tanto temor como las consecuencias del cambio climático. El análisis y la evaluación de las pruebas que confirman un cambio global en nuestro planeta se fundamentan en datos aportados por la ciencia y procesados por complejos sistemas informáticos. La idea más generalizada y oficialista hace recaer en la especie humana y su comportamiento depredador la responsabilidad máxima del cambio climático actual.