De manera sencilla y atractiva, a través de la narración acerca de las experiencias de un grupo de amigos que inician la Universidad, nos introduce la autora, doctora en Filosofía, en una materia que trasciende lo puramente intelectual para imbuirnos de lleno en dos campos que domina de pleno: el arte y su concepción filosófica. «El arte no sólo es arte, sino que es vida, es todo y nada». Y su ciencia, la estética, pretende «provocar en nosotros un desocultamiento de lo que la obra de arte encierra y abre en sí misma, es el camino que nos permite acceder al secreto más recóndito de la verdad, del conocimiento del ser y de la nada».