Argumento de Escapada Azul. Sevilla
Un mundo aparte. Así es Sevilla. Una gran ciudad, sí, pero que en vez de a tubo de escape huele a azahar. La maraña de callejuelas del casco antiguo, con el moruno barrio de Santa Cruz como paradigmático ejemplo, transportan al visitante a otras épocas, a otra manera de vivir. La siempre visible Giralda como un faro de la historia, a un paso de los bellos y armoniosos alcázares. Y, por supuesto, la puesta de sol en el Guadalquivir desde las terrazas de Triana, con la torre del Oro haciendo honor a su nombre en este mágico momento de la tarde. Bajo un sol casi siempre de justicia, Sevilla es un lugar donde se sabe disfrutar de la vida. Nada como tomarse un vino y unas tapitas al atardecer, charlando a voces de cualquier tema al que casi siempre se encontrará una vertiente cómica.
Y si se buscan experiencias únicas, ahí están la Semana Santa y la Feria, incomparables explosiones de devoción y alegría.0