Ric Perrini, presidente de Blackstone Diamonds y el soltero más sexy de Sidney, aún tenía algo que no había logrado conquistar: a Kimberly Blackstone. Hacer que volviera a la empresa de su padre iba a ser lo más difícil que Ric había hecho en su vida. Pero conseguir que volviera a sus brazos iba a ser lo más placentero. Ya la había dejado escapar una vez; esta vez no aceptaría otra cosa que no fuera su total rendición.