¡En la cama con un millonario!Después de poner fin a su compromiso con un acaudalado promotor inmobiliario, Serena juró no volver a acercarse a otro hombre rico. Estaba claro que una peluquera como ella no podía ser lo suficiente buena para un hombre tan poderoso, y eso fue precisamente lo que le oyó decir al magnate australiano Nic Moretti... Además de la furia que sentía hacia él, Serena tuvo que enfrentarse a la dura prueba de estar a su lado un día tras otro. Había decidido darle una lección, pero no contaba con la atracción sexual que había entre ellos, ni con que comenzarían una apasionada relación. Aun así, Serena estaba segura de que Nic querría una mujer de su misma clase social...