A lo largo de los siglos los mitos que se refieren a la guerra de Troya y a sus protagonistas Aquiles, Héctor, Elena-, transmitidos desdela Ilíadapor una numerosa secuencia de recreaciones literarias, han mantenido viva su fascinación. Sólo cuando Heinrich Schliemann pretendió hacia 1873 haber descubierto el tesoro de Príamo y las ruinas de Troya en Hisarlik, en la actual Turquía, comenzó a pensarse en la posibilidad de que los acontecimientos narrados por Homero tuviesen una base histórica. Michael Wood nos narra en estas páginas la crónica milenaria de la búsqueda de Troya, prestando especial atención a las excavaciones de las últimas décadas, hasta el hallazgo en Besik Tepe de lo que los antiguos creían que era la tumba de Aquiles, y de un cementerio con restos de cremaciones, en lo que se supone que es la posible localización del campamento de los sitiadores de Troya.