Cuando Patrick toca el violín, suceden las cosas más increíbles: los peces empiezan a volar, las vacas a bailar y de los árboles brotan pasteles en lugar de manzanas. Y de repente hasta los más tristes sonríen y mil fuegos artificiales estallan en el cielo. ¡Colores por todas partes!
Patrick demuestra lo muchísimo que necesitamos la música, la fantasía e historias como la suya para hacer de nuestro mundo un lugar más bonito y divertido. Un lugar mejor.