Argumento de El Tributo de las Treinta Doncellas
Se trata de una villa anquilosada en el tiempo que en la Edad Media, cuando la Reconquista, fue tomada por don Pedro Suárez de Mendoza mediante capitulación del moro que, entre otras ofertas para conservar su vida y la de los suyos, se obligó a entregar - según costumbre de la época practicada lo mismo por moros que por cristianos, - Treinta doncellas vírgenes para uso y disfrute del conquistador, que con estas condiciones tomo posesión del lugar y su castillo. Y así pasaron los años y los siglos, ya el dicho lugar en posesión de los cristianos. Y el lugar y el castillo moro, transformado en Palacio de los sucesores de aquel Suárez de Mendoza, pasó a ser asiento de su Señorío y Mayorazgo, extinguiéndose mucho tiempo atrás, como es lógico, aquel tributo que, sin embargo, los pueblerinos siempre lo recordaron, desconfiando, hasta en la actualidad, que de alguna manera - dádivas, engaños, , etc. - el Señor de turno no continuara cobrando tal tributo, lo que mantenía a tal población en una constante situación de sospecha origen del drama final.0