Los fundamentos del mundo occidental se tambalearon con la irrupción del terrorismo global el 11 de septiembre de 2001. Las políticas antiterroristas parecían obsoletas y ahora se buscan nuevas medidas para neutralizar la amenaza. Este libro presenta la respuesta de Occidente al reto del terrorismo global, caracterizada por una apuesta por la seguridad que atenta a menudo contra el Estado de derecho.