Argumento de El Te de Kuming
Nunca sabes quién es la persona que puede cambiar tu vida. Nunca sabes cómo lo hará. A veces bastan las palabras, si estas son las adecuadas. Si salen del corazón y de la sabiduría de alguien que solo persigue hacerte el bien.
Esta novela es la historia de Clara y de un regalo anónimo que recibe el día de su cumpleaños. Aparentemente es algo carente de importancia, pero que a lo largo de la historia no solo la ayudará a sobrevivir en el mundo hostil en que se desenvuelve, sino que también le hará comprender que en esta vida todos tenemos un propósito, y que la única forma de ser feliz es descubrirlo y amarrarse a él.
Miguel Ángel Furones, el mago de las palabras, se sirve de su tercera novela para descubrirnos que no hay nada más real que la ficción, cuando esta se convierte en nuestro propio espejo. Que no hay nada más sólido y sanador que compartir con alguien nuestras fantasías. Porque serán ellas las que desvelarán esos sueños que nunca nos contamos a nosotros mismos, llevándonos de la mano al lugar en el que debemos estar: lejos, muy lejos de donde ahora nos encontramos.1