Partiendo de esta situación, y sobre una base interdisciplinaria que integra ideas procedentes de las ciencias sociales, la ecología, la cosmología, la psicología y la espiritualidad, la presente obra busca formular los principios de una sabiduría que conduzca a una auténtica liberación: un camino hacia la comunión, diversidad y creatividad de la comunidad humana que constituye la Tierra. Los autores describen esta sabiduría mediante la palabra china Tao, que significa tanto la vía que conduce a la armonía como el propio desarrollo del cosmos. Ofrecen así una nueva síntesis: la «ecología de la transformación». Pues si la conexión, la relación y la interdependencia son conceptos fundamentales de la ecología, también forman la esencia de la experiencia espiritual. La ecología puede constituir de este modo el puente imprescindible entre ciencia y espiritualidad.