En compañía de su hijo Silvio, Daniel recorre los parajes del Alto Tajo, lugar legendario en el que piensa esparcir las cenizas de su esposa. Son los mismos lugares en que el hombre y la mujer, en su primera juventud, compartieron una fuerte pasión amorosa. Al hilo de la caminata, el hombre recuerda su emocionante historia de amor, traición y arrepentimiento.
Narrada desde una "segunda persona" que compone a la vez un flujo de conciencia y una narración objetiva, esta nueva novela del autor gallego vuelve a confrontar los ámbitos ajenos e indiferentes de la naturaleza -los espacios naturales- con ese desasosiego sentimental y moral que está en la sustancia misma del ser humano.
Esta novela conforma un drama amoroso y familiar muy propio de los tiempos que vivimos, y que sin embargo mantiene vigentes aspectos de la realidad que han sido permanentes estímulos para la ficción literaria.