Lucía sabe que su hija está predestinada a grandes cosas. Para protegerla hará cualquier cosa, incluso oponerse al brutal poder de Kyan .
Cleo y Magnus deben tomar una decisión: el sentimiento irrefrenable que los une, ¿es amor o es odio?
Para todos ellos, ha llegado la hora de la verdad. Los reinos ya han caído; solo queda sobrevivir entre sus ruinas.