Al Mustafá, el Elegido, el Bienamado, como las aguas tranquilas y en calma, como un espejo luminoso, refleja en sus discursos el Yo divino de los habitantes de Orfalese. Gibran, el poeta, el filósofo, brinda a sus lectores la oportunidad de encontrarse a sí mismos a través de estas palabras sencillas y cargadas de veracidad.
El hecho de que El profeta se haya convertido para muchos en libro de cabecera y que sus palabras entrañables alcancen directamente el corazón de sus lectores ha permitido que se hayan editado millones de copias de este libro, que en esta cuidada edición está ilustrado a todo color.