La mayor parte de liderazgo se enfoca en ayudar a los líderes a desarrollar sus capacidades y conocimientos y cerrar las brechas en el desempeño. Esto es necesario, pero no suficiente y el doctor Henry Cloud demuestra que los mejores líderes se basan en otro recurso vital: relaciones personales y profesionales que potencian el crecimiento y les ayudan a superar los límites actuales.
La sabiduría popular sugiere que no debemos permitir que otras personas tengan poder sobre nosotros, pero la realidad es que lo hacen, para bien o para mal. Piensa en el jefe que te menosprecia mediante comentarios cortantes versus uno que te reta a superarte. O el colega que siempre busca el protagonismo versus el que te da la confianza para terminar un proyecto difícil. O el cónyuge que es honesto y te apoya versus el que se resiente con tu éxito. No importa lo brillantes, inteligentes o experimentados que sean los grandes líderes, todos comparten algo en común: el poder de otros en sus vidas.