Argumento de El Padre de Elena
Encuadernación: Rústica
Luis, no es un personaje de especial significación ni relevancia, sino uno de tantos damnificados por una sociedad tremendamente cruel de víctimas y victimarios (que de continuo se intercambian los papeles), un modelo social competidor y deshumanizado que obliga a la inmensa mayoría de los seres humanos a sumergirse en el egoísmo y el desamor, en la ausencia interiorizada de los más elementales principios éticos y solidarios, siempre en aras, claro está, de «la realidad de la vida».
Dentro de una familia de clase media-baja, el instinto de supervivencia prima sobre cualquier otra consideración, sin dejar lugar alguno a la solidaridad o a la compasión, convirtiendo a los personajes en prisioneros de sus sentimientos.1