En este libro vemos la angustia y las expectativas de independencia
cuando se es dependiente por obligación, cuando la inutilidad es un
estado concreto y no un estado mental que nos autoimponemos: todas las
cosas simples se vuelven un problema para Alexis en la dimensión física
y así nos muestra que los "sanos" hacemos eso a cada rato en nuestra
cabeza.
Es una aventura de vida, cada escena de superación está contada
minuciosamente y, con algo de ironía, transmite la sensación de la
dificultad real. Alexis no se autocompadece sino que va construyendo su
modo de ser a través del relato.
Una historia real, contada con tanta crudeza como sentido del humor. Una
novela para emocionarnos y reflexionar sobre la voluntad, el amor propio
y la ambición de superar nuestros límites.