La actriz se define como una nómada profesional y una viajera compulsiva. Reconoce que no es un cocinera profesional pero que ha aprendido recetas en muchas cocinas de todos los pisos compartidos de todos los países en que ha vivido y de todas las ciudades que ha visitado. En este libro se recogen las mejores recetas mundiales que ha ido recopilando en bares, restaurantes y puestos callejeros de procedencias geográficas diversas. Presenta platos sabrosos que pueden estar listos en poco tiempo con solo 4 componentes; desde tentempiés, ensaladas, sopas y cremas, pastas, carnes, pescados y mariscos, acompañamientos, salsas y vinagretas hasta postres y bebidas. Como en el anterior libro, las recetas son sencillas, económicas, rápidas (la autora asegura que se elaboran en menos de media hora), flexibles, variadas y además universales.