Argumento de El Monasterio del Paular y el Valle del Lozoya
Cualquier persona que se acerque por primera vez al Valle del Lozoya se sentirá gratamente sorprendido ante el magnífico espectáculo de su naturaleza, las altas montañas cuajadas de nieve, los densos bosques de pinos y robles, las plácidas praderas, las pequeñas poblaciones rodeadas de vegetación, las aguas cristalinas llenas de luz y color, todos estos elementos constituyen un paisaje casi idílico que impregna fácilmente el espíritu del viajero. Este paraje excepcional ha sido conformado por la acción de los hombres durante siglos, dando como resultado una atmósfera que nos sigue pareciendo armoniosa, pausada, silenciosa, equilibrada, un microcosmos realmente complicado de hallar en estos agitados tiempos, que nos invita al goce y al deleite. En este trabajo, vamos a tratar de narrar una serie de hechos históricos que nos van a permitir mejorar nuestro conocimiento acerca de lo sucedido en este privilegiado entorno, articulado por el río Lozoya, y ello gracias a la documentación producida a lo largo de su dilata historia de más de seis siglos por los cartujos del Paular. Aparte de los papeles existentes en el Archivo Histórico Nacional, en gran medida ya utilizados por otros autores, y del Libro Becerro del Paular, elaborado hacia el año 1565, hemos estudiado, y este es el principal mérito de este trabajo, numerosos documentos procedentes de los últimos propietarios privados del convento, así como una serie de fotografías del mismo origen, realizadas en los años anteriores e inmediatamente posteriores a la Guerra Civil, que ilustran muy gráficamente sobre la progresiva decadencia del monumento. En definitiva, presentamos un libro que, tratando sobre un eminente monumento de nuestro país, toca especialmente uno de sus aspectos menos conocidos y valorados, aunque creemos que no menos importante, como es su entorno natural, que nos gustaría con este trabajo contribuir a preservar y divulgar.0