Lo que se deriva de la obra del genial autor cómico francés no son consejos, orientaciones mediocres o advertencias reformadoras que suelen desestimarse, sino antihéroes que, a la manera de espejos deformantes, nos muestran directa y eficazmente los auténticos valores morales, recordándonos así, con frase propia, que no es posible ser menos que hombre .