Los portales empezaron a pintarse porque alguien imaginó, alguien tuvo el valor de soñar y afirmar que no hay fronteras si se sabe mirar más allá. Y para que fueran realidad surgió el gremio de los pintores de portales: ellos abren puertas espaciales que comunican las regiones de la Academia.
Además de las matemáticas para las mediciones, y del arte para la creación, sólo necesitan un mineral granate que se está agotando (bodarita). Sin embargo, han descubierto una veta de bodarita azul, que ¿quién sabe cuántas posibilidades abre, en este o cualquiera de los mundos posibles?
Los estudiantes de la Academia serán los protagonistas, que aprovecharán lo aprendido en sus clases, involucrando a sus profesores en la aventura, al más puro estilo Hogwarts.
Siempre debemos recordar que los libros son puertas hacia otros mundos y Laura Gallego nos ofrece mucho más, nos invita a pasar al Libro de los Portales.