¿Qué haría un policía cuando se da cuenta de que una investigación reciente le ha llevado a rememorar su peor pesadilla? Brian Leigh, un policía varias veces condecorado es asignado para un caso algo excepcional, se han encontrado unos restos humanos de finales del siglo XIX en un viejo sótano en la ciudad de Madrid. Al principio no se toma el asunto con seriedad, su experiencia en el cuerpo le avalan y el ego aparece con demasiada prontitud. Pero según transcurre la investigación aparece en escena algo tenebroso, existen ciertos paralelismos entre lo que le ocurrió a su padre, siendo Brian un niño, con los acontecimientos que están ocurriendo en el presente. El miedo vuelve a golpearle otra vez, aunque no tiene más remedio que seguir indagando, a sabiendas que lo que encuentre puede llevarle a las puertas del infierno de la locura y la desesperación. El juego ruin y sangriento del mayor destructor de almas aparece con más fuerza que nunca. Nadie, en su sano juicio, estará preparado para recibir un regalo con este.