La mente estremecida, no acepta lo energético como parte del proceso vital y se aferra a lo material. Lo que nos mantiene vivo, los que nos sostiene dentro de este universo, lo que cada día nos mantiene despiertos, lo que nos inspira, lo que nos hace sentir, pensar, decir y actuar; no es el materialismo, ni la moneda, ni los objetos, ni una casa, ni un coche, ni nada eso, no. Es la energía consciente e inteligente del universo, el lado cuántico de la vida, de tu vida.