Como punto de partida y durante el siglo XIX, la ruptura política de la sociedad tradicional y el paso del concepto de caridad al de beneficencia, acción y ayuda social, marca un hito que tiene en la Ley General de Beneficencia (1849) su principal referente.
Pero no será hasta el año 1924 con la aprobación de la Declaración de Derechos del Niño cuando se llega a alcanzar el reconocimiento jurídico de derechos personales de los menores. El estudio de las leyes de 1987, 1996 y 2015 son el punto de re¬ferencia y a la vez confirmación de dicho resultado. Hemos trasladado este proceso y su explicación a través de documentos concretos que pueden dar respuesta y recoger el pensamiento y los movi¬mientos sociales activos que se llevan a cabo para explicar el proceso y el cambio social del fenómeno del interés superior del menor.