Bruno Thorne, propietario del Mariscombe Hotel, es el autoproclamado rey de Mariscombe, una pequeña ciudad de la costa inglesa, tranquila y encantadora, aunque algo pasada de moda. Pero las cosas cambian cuando el londinense George Law compra el destartalado Rocks Hotel, con la intención de transformarlo en un hotel selecto y refinado. Con la ayuda de su novia Lisa, una atractiva ex modelo, nada parece interponerse en sus planes, pero George no había contado con la aparición inesperada de su ex mujer ni con el aparente interés de Bruno Thorne por Lisa.