Ésta es la novela más personal de Bernardo Atxaga. En ella recorremos, como si miráramos un mosaico hecho con distintos tiempos, lugares y estilos, la historia de dos amigos: Joseba y David, el hijo del acordeonista.
Desde los años treinta hasta finales del siglo XX, desde Obaba hasta California, de la infancia en la escuela a los infiernos de la guerra y de la violencia, Atxaga aborda de forma valiente el tema de la memoria, la nostalgia, la amistad y también de la tristeza del que deja su tierra sabiendo que no volverá.
Y en el centro de las múltiples ramificaciones de esta historia, la única posibilidad de salvación frente a las circunstancias más dramáticas: el amor.