Una novela que es como un arcoíris: unos personajes carismáticos, una premisa original, magia, intriga y aprendizaje sobre la simbología de los colores.
Una atractiva historia rica en matices, para el deleite de los sentidos.
Un día misteriosamente los colores empiezan a desaparecer. Así, sin más. Nadie sabe por qué, ni tan siquiera los científicos son capaces de encontrar una explicación razonable. La comida resulta insípida a la vista, la ropa se ha vuelto uniforme, los diseñadores se desesperan, todo es más aburrido, monótono y triste, y la economía se va a pique. En definitiva, la vida sin colores es deprimente.
En este nuevo mundo en blanco y negro, Arthur, empleado de una fábrica de lápices de colores, conoce a su vecina, Charlotte, una bella locutora de radio ciega de nacimiento que paradójicamente es una científica especializada en el color. Esta curiosa pareja se embarcará en una arriesgada aventura junto a la hija de Charlotte, una niña con un don especial que podría devolver el ansiado color a la humanidad.
Después de leer esta novela deliciosa, no volverás a percibir los colores de la misma manera. Una historia para aquellos que ven con el corazón.
La crítica ha dicho...
«El día que amaneció sin colores es un rayo de sol.» Aveyron
«¡Una lectura llena de color que te alegrará el día!» Fémi-9
«Una novela entretenida y alegre que hará que nos olvidemos de la monotonía gris de lo cotidiano y nos permitirá devolver el color a nuestras vidas.» Biblioteca Magazine
«Una historia con tanta imaginación, que verás el mundo a través de otros ojos.» Freudin
«Una verdadera joyita.» Lecteurs