Hola, sabía que volveríamos a encontrarnos.
Sígueme. La última vez que les vimos creían que se había terminado, combatieron el virus en las calles de Castle Hill; creyeron que lo habían detenido y estaban a salvo. No podían estar más equivocados.
El Cuarto Jinete está a punto de ser liberado en pleno centro de Los Ángeles. Desatará toda su fuerza y crudeza sobre sus casi cuatro millones de habitantes. Si no consiguen detenerlo se esparcirá por todo el continente y correrán ríos de sangre.