Tuvo un primer matrimonio tormentoso y desgraciado con el gran y extraño ocultista Eliphas Levi. Aunque en la mayor parte de sus cuentos predomina el ambiente realista, escribió una serie de piezas de carácter macabro y terrorífico, verdaderas joyas del género, donde abundan los espectros que reclaman venganza, la alucinación y el crimen escabroso.
Sin duda, los relatos agrupados en El convidado de los muertos constituirán un festín para los amantes del terror clásico.