El ejercicio de la capacidad crítica es algo que hay que potenciar desde la escuela, incrementar en la Educación Secundaria y, en su caso, desarrollar al máximo en la etapa universitaria. Y nada mejor para ello que enfrentarse con textos ensayísticos y artículos periodísticos de opinión para, comentándolos en su fondo y forma, confrontarlos con las propias opiniones en relación con su contenido; irnos textos, que, por otra parte, pueden convertirse en el acicate para, tomados como modelos indirectos de referencia, servir de puente para convertir al lector en escritor de textos de análoga naturaleza. Con esta finalidad hemos abordado la redacción de las páginas de un libro que pretende ofrecer a lectores procedentes de los más variados campos del saber y, por supuesto, también a profesores y a alumnos, unas propuestas metodológicas que les sirvan de orientación para el análisis, la valoración y la escritura de este tipo de textos, ya sean de naturaleza expositiva o argumentativa.
Nuestro proceder en la selección ha sido, evidentemente, del todo subjetivo, si bien hemos pretendido buscar textos que, desde el punto de vista conceptual, valoren de forma positiva el buen uso del idioma y de las nuevas tecnologías o sirvan para adentrarnos en valores del espíritu que merecen ser destacados y compartidos; y escritos por ensayistas y periodistas de reconocido prestigio, salvaguardando su ideología hasta donde nos ha sido posible y respetando en todo momento su libertad de pensamiento y expresión: ellos y ellas son los responsables de sus palabras, y nosotros de hacérselas llegar al lector subrayando los aspectos que nos han parecido más relevantes de sus escritos. El procedimiento para comentar los textos ha seguido tres pasos. En primer lugar hemos entresacado todas las palabras y expresiones que necesitaban una explicación contextual; en segundo lugar, hemos explicado cuantos referentes culturales contienen los textos; y, en tercer lugar, hemos afrontado el comentario crítico-ideológico propiamente dicho. El aluvión de notas a pie de página ofrece al lector la posibilidad de abrir nuevas vías personales de investigación que le lleven a que nuestro comentario sea solo el punto de partida para despertar en él otras alternativas en principio insospechadas. Y aquí está la posible virtud de este manual, que deseamos que se convierta en una herramienta de trabajo para «enseñar a pensar»; porque un país Ubre necesita ciudadanos críticos; y las aulas son el lugar idóneo para fomentar ese sano sentido crítico que redunde en una mayor tolerancia en beneficio de la mejor convivencia social.