Daniel Mantovani, el más grande escritor argentino después de Jorge Luis Borges y el único galardonado con el Premio Nobel de Literatura, está de regreso. Pero no sólo a través de esta novela descarnada, axiomática y llena de verdades. Mantovani está de vuelta en Salas, el pueblo en el que nació, ese que inspiró toda su obra, y el mismo al que no había vuelto en décadas.
¿Realidad o ficción? ¿Material para un film o la vida misma? Mantovani relata, en el inopinado retorno a Salas, la tensión entre el escritor cosmopolita y la vida pueblerina. El viaje tendrá para el narrador múltiples aristas: será el regreso triunfal al pueblo que lo vio nacer, donde se reencontrará con viejos amigos, amores y paisajes de juventud. Pero sobre todo será un viaje al corazón mismo de su literatura, a la fuente de sus creaciones y su inspiración. Una vez allí, Mantovani constatará tanto las afinidades que aún lo unen a Salas como las insalvables diferencias, que lo transformarán rápidamente en un elemento extraño y perturbador para la vida del pueblo. Parte tragedia, parte comedia, El ciudadano ilustre cuenta la Argentina como sólo Daniel Mantovani puede hacerlo.
«Pienso que en Salas están situados todos mis libros y, en este punto, incluso para mí, pareciera que ese lugar no existe más que en la ficción. He tenido la precaución de no incluirme en mis libros; siempre pensé que hablar de uno mismo era un ejercicio imposible, como desdoblarse. Pero más allá de estas elucubraciones, si jamás caí en la tentación de fabular sobre mi propia vida, fue porque mi vida siempre me ha parecido poco interesante.»