"Desde El Quijote a Hamlet, pasando por las crónicas de su admirado
Joaquín Edwards Bello y las novelas de terror de Stephen King, el autor
nos acerca a diversos libros a través de un ejercicio libre, espontáneo
y «al reverendo lote» #según confiesa#, en el que «divaga a destajo y
sin vergüenza» sobre algunos de sus platillos de papel favoritos.
De manera que saltaremos de Antonio Skármeta a Ray Bradbury, de Moby
Dick a Fausto, del genio de Nicanor Parra a la maestría de Marguerite
Yourcenar, en una invitación sui generis con valiosas recomendaciones
para la supervivencia espiritual inspirada en el puro y digno placer por
la lectura.
"