Desde la época de la Ilustración, la cultura intelectual en Occidente ha rechazado las experiencias extáticas por considerarlas producto de la ignorancia o el engaño. Pero hay mucho que decir de esos momentos en que perdemos el control, cuando nos rendimos a algo superior a nosotros, incluso si eso significa ir más allá de la racionalidad crítica. Evans argumenta que esa visión negativa del éxtasis reduce nuestra realidad y nos niega unas posibilidades de sanación, conexión y sentido que este tipo de experiencias son capaces de procurarnos. Equilibrando narrativa personal, entrevistas y lecturas de filósofos antiguos y modernos, desde Aristóteles a Platón, los místicos orientales, los festivales de música o la misma psicodelia, El arte de perder el control es una guía fascinante, divertida y emocionante de las diferentes formas en que podemos experimentar el éxtasis y cómo puede motivarnos, sanarnos y liberarnos.